
¡Amor!, vamos levántate, casi son las siete. Si te levantas ahora tendrás
tiempo para organizarte con calma y no estarás renegando como siempre.
Vamos cariño, no me mires y luego te des vuelta. Tienes un largo dÃa
hoy.
Menudo problema contigo. Mira todo ese desorden. Ya te habÃa dicho que
si vas a trabajar con tus pinturas trata de no arruinar la mesa del comedor.
Creo que debes ya organizar un estudio. ¡Qué asco! Estas comiendo estas
porquerÃas que te traen por delivery.
Dúchate y ponte a limpiar todo. Justo
hoy que MarÃa no viene. Por cierto, no te conté que la vi el otro dÃa robarse
los jabones de almendras que aún me quedan en el tocador, de esos que
guardaste debajo del mueble. Te advierto que cuando te acuerdes de ellos ya no
habrá ninguno. Le he gritado su vida completita a esa chica y se ha
asustado. ¡Ah! por si fuera poco, también la sorprendà besuqueando a Alonso,
el hijo de la pánfila de la vecina. El chico es un eléctrico, con esa cara de
no haber pecado en la vida, se la montó en dos segundos a ella. Menudo susto
que se llevó, porque creo que me vio. TodavÃa estoy evaluando si le hago saber
a su madre o no. Si sigue asÃ, es mejor que ya no trabaje aquÃ.
Tu cabello ha crecido. Me decÃas que no te gustaba tenerlo largo, pero te ves
bien. Mantenlo asÃ.
Qué lindo dÃa. Hace un sol increÃble. ¿No quieres ir a
pasear? Andas encerrado en casa casi todo el dÃa. La cuarentena fue hace
dos años, pero tú sigues encerrado. Por cierto, la doctora, quiere que
regreses al grupo, ha dejado tres mensajes. Yo creo que deberÃas volver, por
salud. Además, tener amigos hace bien.
Es bueno que hoy tengas que ir a la oficina. Agradezco a mi hermano que te
haya apoyado con el empleo. No sabÃa que tenÃas tanto talento para las
ilustraciones. Quien dirÃa que mis cursos a distancia te servirÃan. Por
cierto, después del trabajo aprovecha en salir a tomar unos tragos con tus
amigos. Relájate un poco. ¿Cómo estará Eugenia? me gustarÃa llamarla y
conversar como antes, su bebé ya debe estar grande ¿Consiguió otra madrina?
¿Te vas sin desayunar?, si no sales con tus amigos aprovecha en comprar
alimentos, en esa refrigeradora no hay nada comestible. No te vayas a comer
las galletas de la lat…Te las comiste… Bah. Con suerte no te da
salmonela, esas galletas llevan allà casi un año. Tu madre las trajo para tu
cumple. Volviendo al tema de tus amigos, el otro dÃa estuve leyendo la
revista que dejó aquella amiga tuya de la editorial. Linda la nena, pero
bastante confianzuda. ¿Tus llaves? Debajo del escritorio, querido.
Y no, claro que no estoy celosa. Solo que me parece pronto que
quiera pasar la noche aquÃ, conócela un poco más.
Antes de irte, no olvides la cita con mis padres, mañana. Tranquilo. Cambia
esa cara, amor, ya son dos años.
Ya sabes, me gustan los
alelÃes.
Y sÃ, yo también te echo de menos.
Cuento publicado en la revista CollhibrÃ